Áreas aptas para producción sustentable de Dactylopius coccus costa y Opuntia cus-indica en Santiago del
Estero, Argentina
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Enero - Junio 2019
referencia de las recomendaciones diseñadas
para mejorar la situación existente de uso de
tierras, ya sea incrementando la producción
o limitando la degradación de los recursos
(FAO, 1978).
Aunque el concepto de zonicación
es esencialmente simple, la metodología
desarrollada requiere de un análisis que
implica la combinación de capas de
información espacial para denir zonas y
se presta, especialmente, a la aplicación de
las funciones de análisis de los Sistemas de
Información Geográca (SIG).
Las cochinillas (Dactylopiidae:
Hemiptera) son consideradas plagas de
Cactáceas del género Opuntia. Se mencionan
diez especies de cochinillas (Ben-Dov y
Marota, 2001). Una característica particular
de estos insectos es que poseen una cubierta
cerosa con aspecto algodonoso, que las
protege del medio ambiente y de otras
plagas. El género Dactylopius reúne especies
de valor ecológico, económico y genético
a nivel mundial, si bien la distribución
geográca nativa únicamente se ubica en
América.
A diferencia de las otras especies del
género, Dactylopius coccus es ampliamente
estudiada y, además, posee la característica
que se cultiva con nes productivos. Esta
producción se ve limitada por factores
bióticos y abióticos para lo cual se emplean
invernaderos o módulos de cría que permiten
controlar factores abióticos (lluvia, viento,
etc.) que causan pérdidas en la producción
(Campos y Llanderal, 2003).
Méndez Gallegos et al. (1993)
encontraron que la temperatura más
favorable para el desarrollo de la grana
cochinilla es de 24 ºC, y a 32 ºC no hay
emergencia de adultos. Campos y Llanderal
(2003) recomiendan mantener temperaturas
de 24±3 ºC y 65±5% de humedad relativa.
La producción de grana cochinilla es una
explotación de tipo agrícola-biológico ya
que es producida por un insecto parásito de
las tunas y se alimenta de ellas (FAO, 2011).
En la República Argentina, se utiliza
como planta hospedante de la grana
cochinilla a Opuntia cus-indica en sus
diferentes variedades, lo que no ocurre en
otros países; por ejemplo, en México se usan
también otras especies, como O. tomentosa
y O. cochenillifera, y otro hospedante
perteneciente al género Nopalea (Ferris,
1955).
Las especies de cactáceas de mayor
importancia, tanto económica, como social,
cultural y ambiental, son las pertenecientes
al género Opuntia, conocidas vulgarmente
como “tunas”.
Pocas especies vegetales tienen la
versatilidad de transformación que ofrecen
las tunas para el consumo humano. Sin
embargo, sus posibilidades industriales son
vastas, lo que hace aún más interesante su
cultivo y explotación. Uno de los productos
industriales más atractivos que se obtiene
de las tunas es el carmín de cochinilla. Este
colorante natural es considerado hoy en día
uno de los más seguros, desde el punto de
vista de la inocuidad (FAO, 2011).
La producción de esta especie se presenta
como una excelente alternativa productiva
para hacerle frente a la problemática
productiva del Chaco seco, especialmente
en las áreas degradadas que, actualmente, se
hallan improductivas.
En general, las cactáceas, debido a su fácil
establecimiento por propagación vegetativa,
resultan adecuadas para la recuperación de
tierras que no podrían ser mejoradas a través
de los métodos agrícolas convencionales. La
plantación de arbustos y especialmente de
cactus, es la forma más rápida y segura, si
no la más económica, para recuperar áreas
degradadas (Le Houérou, 1996).
Opuntia cus-indica es, entre las
cactáceas, la de mayor importancia
agronómica, tanto por sus sabrosos frutos
como por sus tallos que sirven de forraje para
la hacienda o pueden ser consumidos como
verdura. El mejoramiento genético que ha
sufrido se remonta a la época prehispánica
(Kiesling, 2003).
Existen varios trabajos que caracterizan
el ambiente del Chaco en sus grandes rasgos
(Galmarini y Rao Del Campo, 1964;
Morello y Adámoli, 1974), pero todavía el
conocimiento de la ecología de los animales
y de los procesos en el sistema es escaso.
El Chaco es una región donde el tipo de
vegetación natural corresponde a un bosque
xerofítico con predominancia de quebracho
colorado (Schinopsis lorentzii) y quebracho
blanco (Aspidosperma quebracho-blanco)
(Hueck, 1978); además de algarrobos