La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial
de la UNALM: Un estudio de caso
Communicative competence in the business Management Engineering degree at UNALM: A case
study
DOI: https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
© Los autores. Este artículo es publicado por la revista Tierra Nuestra del Departamento Académico de Ciencias Humanas
de la Facultad de Economía y Planicación, Universidad Nacional Agraria La Molina. Este es un artículo de acceso abierto,
distribuido bajo los términos de la Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.(https://creativecommons.org/
licenses/by/4.0/) que permite Compartir (copiar y redistribuir el material en cualquier medio o formato), Adaptar (remezclar,
transformar y construir a partir del material) para cualquier propósito, incluso comercialmentte.
Forma de citar el artículo: Corzo-Zavaleta J., Navarro-Castillo, Y., & Anchante-Arias, J.A. (2024). La competencia
comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso. Tierra Nuestra, 18(2),
142-153. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Janet Corzo-Zavaleta1, Yulissa Navarro-Castillo1,2* , J. A. Anchante-Arias1
1 Universidad Nacional Agraria La Molina, Lima, Perú.
2 Universidad Politécnica de Madrid.
* Autor de correspondencia: ynavarro@lamolina.edu.pe
* https://orcid.org/0000-0002-3697-5163
Recibido: 2/06/2024; Aceptado: 1/10/2024; Publicado: 30/12/2024
Resumen
El presente estudio es un análisis de la noción de la competencia comunicativa en la propuesta
curricular y académica de la carrera profesional de Ingeniería de Gestión empresarial en la
Universidad Nacional Agraria La Molina (Lima, Perú). Dicho análisis se basa en el caso del curso
de Comportamiento y cultura de las organizaciones, materia de especialidad que corresponde al
tercer ciclo académico de su malla curricular. En primer lugar, se profundiza sobre el concepto de
competencia comunicativa desde las áreas de la educación y la lingüística (marco referencial). A
continuación, se explicita la metodología, la cual es de orientación cualitativa con estudio de casos.
Se establece una línea jerarquizada de la documentación referida al estudio en cuestión y se elabora
la respectiva evaluación. En este punto se desarrolla el análisis de caso, el cual tiene como eje la
propuesta del curso de Comportamiento y cultura de las organizaciones. Especialmente, la sección
correspondiente a “La comunicación”, así como los puntos relacionados a las competencias del curso
en general y a los alcances de las evaluaciones. Se observa que, en cuanto al análisis del proceso
que conduce de la documentación general a la más especíca, hay una adecuación en la evaluación
de la competencia comunicativa en el curso en cuestión. Sin embargo, también hay ciertos límites u
omisiones en el proceso en sí, tanto en el desarrollo del enfoque como en los contenidos.
Palabras clave: Competencia comunicativa, competencia lingüística, Gestión empresarial,
UNALM, enfoque basado en competencias.
Tierra Nuestra 18(2): 142-153 (2024)
Tierra Nuestra
ISSN 2519-738X (En línea), ISSN 1818-4103 (Impresa)
https://revistas.lamolina.edu.pe/index.php/tnu
ARTÍCULO ORIGINAL –RESEARCH ARTICLE
143
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
Abstract
This study examines the notion of communicative competence in the curricular and academic
proposal of the professional career of Business Management Engineering at the National Agrarian
University La Molina (Lima, Peru) in the professional career of Business Management Engineering.
This analysis is grounded on the instance of the course on Behavior and Culture of Organizations, a
specialized area that corresponds to the third academic cycle of its curriculum. Initially, the concept
of communicative competence is enriched from the domains of education and linguistics (referential
framework). Subsequently, the methodology is made explicit, encompassing a qualitative approach
through case studies. A hierarchy of documentation is established for the study in question, and the
respective evaluation is prepared. At this point, a case analysis has been developed, which has as its
axis the proposal of the course on Behavior and Culture of Organizations. Particularly noteworthy
are the sections pertaining to communication, as well as the points pertaining to the competencies
of the course in general and the scope of the evaluations. It is observed that, when considering the
process that leads from general to more specic documentation, there is an adequate evaluation of
communicative competence in the course in question. Nonetheless, there exist certain limitations or
omissions in the process itself, both in terms of its development and its contents.
Key words: communicative competence, language competence, Business management, UNALM,
competency-based approach.
Introducción
En el mundo competitivo de hoy, la habilidad
comunicativa es uno de los pilares en la
formación de todo profesional. Pero ¿qué es
especícamente la competencia comunicativa
y cómo se aplica su desarrollo dentro de una
carrera universitaria en particular? La presente
investigación busca dar luces sobre la forma en
que se desarrolla la competencia comunicativa
en la carrera de Ingeniería de Gestión
Empresarial, la cual forma parte de la Facultad
de Economía y Planicación de la Universidad
Nacional Agraria La Molina (Lima, Perú).
Este estudio tiene como punto de partida
el análisis de la implementación de la
competencia comunicativa en el sílabo del
curso de Comportamiento y cultura de las
organizaciones, que forma parte de la malla
curricular de la carrera en cuestión. Para que
dicho análisis presente la debida profundidad,
primero se constituye una revisión de la noción
de competencia desde la educación, en la que
comienza a usarse e implementarse desde el
plan Bologna y el posterior proyecto Tuning
para América Latina, los cuales establecen las
bases del enfoque basado en competencias.
A continuación, se evalúa la competencia
comunicativa desde los aportes lingüísticos de
Noam Chomsky y Dell Hymes.
Se propuso la revisión de documentos que
permita visualizar la efectividad en la aplicación
de estos conceptos en un curso universitario
de pregrado que contempla el desarrollo de
habilidades de comunicación enmarcado en el
currículo basado en competencias. El problema
identicado fue la diversidad de conceptos que
existen y la interpretación que cada docente
universitario le podría dar para impartir su curso.
Como objetivo principal, se analizaron
y compararon documentos formales a nivel
gubernamental como la Ley Universitaria N°
30220, así como la propuesta curricular de la
universidad en estudio, y a nivel operacional se
han revisado los sílabos de la mano con la literatura
bibliográca y las metodologías aplicadas para
conseguir el desarrollo de las competencias de
comunicación. El estudio se fundamentó en la
importancia de mantener un estándar alto de
calidad en la educación universitaria peruana
a partir de la reforma realizada en el año 2014
y que de manera progresiva ha ido certicando
a las universidades con niveles mínimos de
calidad que las acrediten y les den acceso al
licenciamiento que autoriza el funcionamiento
de las casas de estudios superiores.
La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso
144
Julio - Diciembre 2024
1. Marco referencial
1.1. La noción de competencia
En las décadas de 1980-90, surge la llamada
“sociedad del conocimiento” dentro del
campo laboral. En este contexto de cambios
económicos y políticos, se adhieren los grandes
avances de la ciencia y la tecnología, sobre todo
en el campo de las comunicaciones que dieron
lugar a la sobrevaloración del conocimiento
como el recurso básico de una empresa y para
el desarrollo social y el control económico. Por
ello, el conocimiento pasa a ser considerado
como un activo denominado Capital Intelectual
que genera un valor potencial para la empresa:
este es el conocimiento generador de riquezas
(Correa, 2007). Ello conllevó a una valoración
del saber hacer frente al mero conocimiento,
por lo que se promovieron valores como la
formación continua y la exibilidad para
adaptarse a los cambios que exigen las nuevas
demandas laborales, así como la capacidad
para trabajar en equipo, liderazgo y creatividad.
La implementación de las competencias
laborales se basa en cuatro ejes: identicación,
normalización, formación y certicación
(Jiménez et al., 2015).
En otro ámbito, surge el concepto de
competencias desde el ámbito de la psicología
organizacional con los trabajos de MCclelland
(1973), para quien la generación de las
competencias es el resultado de la relación
entre trabajo exitoso y el test de inteligencia
en el ingreso laboral. Según esta visión
las motivaciones, características y valores
personales pueden ser medibles a través de
comportamientos observables (Tobón, 2010).
De otro lado, la Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico
(OCDE, 2003) señala que la competencia
es un concepto más amplio que abarca más
que conocimientos y habilidades, puesto que
implica la capacidad de satisfacer las demandas
a partir del uso de recursos psicosociales que
incluye las habilidades y actitudes del individuo
en un contexto particular. Un ejemplo de ello se
daría en la capacidad de comunicarse de manera
efectiva, ya que toma como base el manejo
y conocimiento del idioma, sus habilidades
prácticas y la actitud con sus interlocutores.
De acuerdo con Perrenoud (2004), la
competencia es una capacidad de movilizar
varios recursos frente a una situación
concreta, esto es: saberes, habilidades, valores,
actitudes, responsabilidad, riesgo, actitudes
y conocimiento. En consecuencia, en el
desarrollo de la competencia se debe tener en
cuenta las situaciones concretas y los recursos
que moviliza el individuo. De acuerdo con
lo expuesto, se observa que el desarrollo del
concepto de competencia está ligado a una
actividad humana que es transversal y puede ser
aplicado a cualquier situación.
El concepto de competencia es complejo
y dinámico, ya que implica el “uso” que hace
referencia al contexto signicativo: este es el
contexto donde se requiere hacer cosas en los
dominios cognitivo, afectivo y psicomotor
(Ruiz, 2010). En ese sentido, la formación
desde el enfoque por competencias busca
generar las capacidades que le permitan al
individuo adaptarse a situaciones cambiantes, el
desarrollo del pensamiento crítico, comprender
y solucionar situaciones complejas a través
del uso de conocimientos teóricos, prácticos,
experiencias y conductas.
A continuación, se analiza el concepto de
competencia en el ámbito educativo.
1.2. La competencia en el ámbito educativo
La evolución semántica de competencia
se evidencia con la aparición del término
“capacitación”, ligado a la cualidad de aplicar
conocimientos para la resolución de situaciones,
lo cual conlleva a considerar a un sujeto como
competente, capaz o apto. Es así que el modelo
educativo y de entrenamiento basado en
competencia surge de la tendencia industrial
más que de la educacional. Esta tendencia se
desarrolló principalmente en Reino Unido
a partir del debate de 1986 sobre el modelo
educativo que era considerado obsoleto y el
gran responsable del declive de la economía
británica. Ello llevó a buscar profesionales con
habilidades especícas y genéricas, con el n de
mejorar la economía (Correa, 2007).
145
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
Para Hirtt (2009), si bien existen algunos intentos
por tratar de deslindar las corrientes económicas
del enfoque de competencias educativo a través
de una visión constructivista, es innegable
que la inuencia del mundo empresarial se
conrma en propuestas educativas del mundo
desarrollado donde se declara que la educación
debe preparar a los estudiantes a funcionar de
manera exible y adaptable en su futura vida
profesional: la formación ya no es concebida
como n en sí misma, sino como un medio para
adquirir ciertas competencias.
En ese sentido, se introdujeron una serie
de cambios en el modelo educativo y el
currículo. Es así que en Estados Unidos se
elabora el Proyecto de competencias básicas a
nivel superior y en Europa se crea el Espacio
Europeo de Educación Superior con el objetivo
de promover la movilidad y aumentar las
posibilidades laborales, lo cual conlleva a la
declaración en Bologna rmada por 29 países.
(Jiménez et al., 2015).
A las reformas llevadas a cabo en la
Unión Europea en materia de educación, le
siguen las propuestas a nivel de la OCDE y el
Banco Mundial que propusieron una lista de
“habilidades básicas para entrar en la economía
del conocimiento”. Asimismo, en el Decreto
Misión de 1997 de la comunidad de Bélgica,
donde se denen las prioridades de la escuela,
se maniesta ocialmente por primera vez el
desarrollo por competencias y la utilización
ecaz de la enseñanza al servicio de la vida
económica.
Las políticas educativas a nivel mundial
integraron el enfoque por competencia en los
años 2000, siendo clave en este proceso el
Proyecto Tuning. Como se señala en dicho
proyecto, la competencia es la “lo que una
persona es capaz o competente de ejecutar”
o “el grado de preparación, suciencia y/o
responsabilidad para ciertas tareas” (Directorate
General for Education and Culture of European
Commission, 2003, p. 8). Sin embargo, han
surgido varias críticas al proyecto Tuning en lo
que respecta a la forma como se equiparan los
conceptos de aprendizaje y competencias, pues
las competencias no pueden ser especicadas de
forma precisa.
Un concepto vinculado al de competencia en
la educación es el de habilidad. Sobre este punto,
Navarro y Ortiz (2010) describieron cuatro
momentos en el tratamiento de las competencias
comunicativas:
1. El estudiante se prepara para interactuar con
el texto oral o escrito, tanto desde el punto
de vista cognitivo como desde el punto de
vista afectivo-motivacional, con énfasis en
este último;
2. La interacción del estudiante con el texto,
en el que procesa la información para
comprenderla y elaborarla;
3. Las valoraciones del texto desde una
posición crítica;
4. Aplicación en la vida futura en estudios
posteriores o en la vida profesional. (1993,
p.30)
La representación de estos momentos o
estadios inciden en aspectos clave que no se
habían mencionado hasta ese entonces: en
primer lugar, la importancia de la afectividad o
los estados emotivos en la realización de actos
comunicativos; en segundo lugar, la evaluación
o posición crítica que se deben asumir frente
a la experiencia llevada adelante en un acto
comunicativo. Reyzábal (2012) vuelve a
poner énfasis en la importancia del manejo de
habilidades extralingüísticas durante el contexto
de una acción comunicativa concreta. Con ello,
coloca a la competencia lingüística dentro del
marco de la competencia comunicativa, lo cual
se sintoniza con las propuestas de diversos
investigadores1:
(…) para alcanzar la competencia
comunicativa se necesita un saber global y
un conjunto de destrezas, así como el control
de emociones, mientras que para dominar la
verbal se requiere, además de lo anterior,
conocimientos lingüísticos y paralingüísticos
generales junto a habilidades para el uso
correcto, coherente, apropiado, adecuado y
oportuno de los textos o discursos. (p.73)
1 Revísese la bibliografía del libro de Ortiz y Navarro (2010).
La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso
146
Julio - Diciembre 2024
Sobre la base de lo anterior, Bermúdez y
González (2011) centraron los alcances de la
competencia comunicativa en el contexto de
las organizaciones. Es así como se evidenció
el proceso de las habilidades comunicativas
exitosas desde el ámbito educativo hasta el
laboral. Con ello, se puede armar que la
comunicación ecaz y eciente, desde una
perspectiva que va de lo individual a lo colectivo,
repercute en los logros que vamos a obtener a
partir de los proyectos establecidos, sean estos
en nuestro rol de estudiantes o de profesionales.
Por eso, su estudio y puesta en práctica atañe a
diversas áreas de investigación: “El estudio de la
competencia requiere (…) de una visión holística
alejada de posturas mecanicistas y rígidas para
dar paso a una multifactorial y necesariamente
subjetiva o por lo menos exible” (p. 99).
Entonces, si bien la noción de competencia se
desarrolla sobre todo en los ámbitos educativo,
industrial y económico, la problematización
de la competencia comunicativa atañe también
a los alcances que ha tenido en los estudios
lingüísticos.
A continuación, se reexiona sobre la
competencia comunicativa dentro del contexto
de la lingüística.
1.3. La competencia en el ámbito lingüístico
La teoría de la competencia comunicativa del
antropólogo Dell Hymes es una respuesta a la
noción de competencia lingüística de Noam
Chomsky. Este último explica los conceptos de
“competencia” y “actuación” en su libro Aspects
of the Theory of Syntax (1965). Elaborando
una brevísima síntesis de dichos conceptos2,
Chomsky arma que la competencia surge
cuando el niño comienza a adquirir una lengua
natural. Es en ese momento cuando su mente
comienza a activar la “gramática universal”
(estado 1 o inicial del lenguaje) o conjunto de
reglas sintácticas, es decir, de combinaciones
de palabras. Es “universal”, pues, a decir de
Chomsky, dichas reglas son idénticas en todos
2 Es necesario precisar que el “generativismo chomskiano”
viene pasando por diferentes etapas que se siguen
desarrollando. La primera etapa, que es objeto de la
crítica de Hymes, la podemos denominar como la de la
“gramática universal”.
los seres humanos. Ahora bien, ese sería el
momento en que el niño empieza a desarrollar la
“competencia” de una lengua, es decir, el manejo
o habilidad para la producción de oraciones en
esta lengua (estado 2 o de desarrollo). Y, con el
pasar del tiempo, va a actualizar su competencia
en el seno de su interacción social. A dicho
proceso se le conoce como la “actuación”.
En términos de Barón y Müller (2014),
“la competencia corresponde a la capacidad
que tiene un hablante-oyente idealizado para
asociar sonidos y signicados conforme a reglas
inconscientes y automáticas” (p. 419). Así, se
explicita la naturaleza formalista de la teoría
chomskiana: se evidencia la representación
de un hablante-oyente ideal en su desarrollo
del lenguaje y su aprendizaje de la lengua.
Continuando con Barón y Müller, “la explicación
de las condiciones del lenguaje propuesta por
Chomsky es una teoría de la competencia y no de
la actuación, es decir, no explica la producción
ni la percepción del lenguaje en circunstancias
cotidianas, sino en estados abstractos, ideales”
(p.420). Ese es el límite del que partió Hymes
para su propuesta de competencia comunicativa.
Si bien Chomsky acuña los términos de
competencia y actuación, da preferencia al
primero en su teoría formalista basada en
la naturaleza del hablante-oyente ideal: “La
forma en que los hablantes hacen uso real de su
competencia, conocida como actuación, no es
objeto primordial de estudio para el lingüista,
quien se debe centrar en fenómenos gramaticales
formales” (Mairal et al., 2012, p.62).
Hymes publica su artículo “On communicative
competence” en el texto Sociolinguistics en
1972 y desde un primer momento entra en
debate con la teoría chomskiana. En primer
lugar, evidencia la fuerte carga gramatical en el
concepto de competencia lingüística: “Linguistic
competence is understood as concerned with the
tacit knowledge of language structure” (Hymes,
1972, p. 271). En otras palabras, la competencia
lingüística chomskiana atañe exclusivamente a
la creación y desarrollo que un hablante-oyente
ideal realiza de su lengua sin considerar los
aspectos extralingüísticos ni que, en la práctica,
no existe tal hablante ideal.
147
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
Un niño adquiere (o “crea”, para ser más
exactos con la terminología chomskiana)
su lengua materna y dicha adquisición es
básicamente un proceso mental. Además, se
pone énfasis en los niveles que forman parte de
la gramática de la lengua: fonología, semántica
y sintaxis, siendo esta última la base del aparato
generativista chomskiano. Entonces, el concepto
de competencia que surge a partir de esta teoría
es intrínseco e inmanente; solo a partir de la
actuación se puede hablar de la interacción del
hablante con su entorno, pero dicho contexto no
es prioritario en la primera etapa de su propuesta:
“The theory of performance is the one sector
that might have a specic sociocultural content;
but while equated with a theory of language use,
it is essentially concerned with psychological
byproducts of the analysis of grammar, not,
say, with social interaction” (1972, p. 273).
Ahora bien, va a ser justamente este conjunto de
factores socioculturales los que van a determinar
la noción de competencia comunicativa.
Hymes destaca el concepto de actuación,
pues el mismo pone énfasis en la interacción
social del niño en el proceso de adquisición de
su lengua, punto de partida para el desarrollo de
sus habilidades comunicativas. El manejo de la
gramática es solo una de las habilidades que el
niño debe desarrollar para que se convierta en un
integrante de la comunidad en que se encuentra
inmerso: “This competence, moreover, is
integral with attitudes, values, and motivations
concerning language, its features and uses,
and integral with competence for, and attitudes
toward, the interrelation of language with the
other codes of communicative conduct” (1972,
p. 279).
A partir de lo anterior, se entiende que la
competencia comunicativa de Hymes expone
la relevancia del dónde, cuándo, cómo, cuánto
y con quién hablar, pero incluso también del
dónde, cuándo, cómo, cuánto y con quién
callar. A ello hay que sumarle el conjunto de
costumbres o hábitos extra y paralingüísticos
que se ponen en práctica en el seno de una
comunidad, el cual entra en conjugación con los
hábitos lingüísticos.
Al centrar su estudio en niños con problemas
en la adquisición de su lengua, Hymes abandona
la noción de “hablante ideal” chomskiana y
evidencia que la actualización de una lengua
no es una línea recta: a veces hay que emplear
expresiones “impropias” o “imprecisas”, pero
que van a tener un efecto de aceptación dentro del
contexto particular en que alguien se encuentra.
Por ello, la propuesta de Hymes se vincula
con los alcances de los estudios pragmáticos,
en especial con la teoría de los actos de habla:
“The engagement of language in social life has
a positive, productive aspect. There are rules of
use without which the rules of grammar would
be useless” (1972, p. 278).
La teoría de la competencia comunicativa de
Hymes se basa en cuatro parámetros: lo que es
formalmente posible (la gramaticalidad), lo que
es factible (factores sociolingüísticos), lo que
es apropiado (factores contextuales) y lo que se
realiza. A partir de su análisis, solo el primero
es desarrollado en la teoría de la competencia
lingüística de Chomsky y se obvian los demás.
Su objetivo fue, a partir de los alcances tanto
de la pragmática como de la sociolingüística,
sentar las bases para el desarrollo de una teoría
de la actuación que implique no solo el hecho
lingüístico, sino que entre en conjugación con
los demás códigos de interacción: “The concept
of performance will take on great importance,
insofar as the study communicative competence
is seen as an aspect of what from another angle
maybe called the ethnography of symbolic
forms” (1972, p. 281).
Se ha elaborado una revisión del concepto
de competencia en los ámbitos educativo y
lingüístico como parte del marco de referencia,
con el objetivo de que dicho concepto sea
explicitado. A continuación, sobre la base
de lo anterior, se va a analizar la noción de
competencia comunicativa en la propuesta
del curso de Cultura y comportamiento de las
organizaciones, que forma parte de la carrera de
Ingeniería de Gestión Empresarial.
1. Metodología
Este artículo fue diseñado en base a una
metodología cualitativa con estudio de
casos. En primera instancia se analizaron
La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso
148
Julio - Diciembre 2024
los documentos de carácter legal; luego, los
documentos estratégicos de la universidad; por
último, los documentos operativos de ejecución
en la Universidad Nacional Agraria la Molina
(UNALM) a través de la carrera universitaria de
Ingeniería en Gestión Empresarial, con el curso
seleccionado como caso de estudio: Cultura
y Comportamiento de las Organizaciones.
Los documentos revisados fueron: Ley
Universitaria 30220, Ley N°28022-Ley
General de Educación, Reglamento de la
Ley 28740, Ley del Sistema Nacional de
Evaluación, Acreditación y Certicación de la
Calidad Educativa, Estatuto UNALM -2015,
Reglamento General UNALM 2017, Modelo
Educativo-UNALM-Resolución N°006-2017-
AU-UNALM, Malla Curricular de Cursos
Generales - Resolución N°0243-2017- CU-
UNALM.
La UNALM, en el año 2017 se publicó la
directiva general para la elaboración de sílabos
por competencias. En el caso particular de la
carrera analizada, se aprobó el plan curricular en
el año 2019, de ahí en adelante se buscó alinear
todos los sílabos con las competencias, siendo
este el último documento formal analizado en la
investigación.
3. Análisis de los resultados
3.1. Análisis de la documentación
La UNALM propone en su modelo educativo
(2019) el currículo basado en competencias.
La denición de competencia propuesta por la
Universidad es la siguiente:
Capacidad de actuar de manera ecaz en una
situación especíca. Capacidad que se apoya
en conocimientos, pero no se reduce a ellos.
También es un saber hacer, es un conjunto de
capacidades complejas, que permiten a las
personas actuar con eciencia en los distintos
ámbitos de su vida cotidiana y resolver allí
situaciones problemáticas reales, utilizando
recursos propios y del entorno. (p. 30)
Asimismo, la Universidad distingue tres
tipos de competencia: la básica o instrumental,
la genérica y las especializadas, especícas o
técnicas.
Las competencias básicas, también llamadas
instrumentales, son aquellas asociadas
a conocimientos fundamentales que
normalmente se adquieren en la formación
general y permiten el ingreso al trabajo,
tales como: la habilidad para la lectura y la
escritura, la comunicación oral, y el cálculo,
así como el manejo de las tecnologías. Son
las más importantes y están implícitas en
las prácticas laborales y en la educación.
Son las capacidades indispensables para el
aprendizaje de una profesión. (p, 75)
La UNALM concibe un paradigma de
estudiante que asume un rol activo y es
constructor de sus conocimientos, dinámico,
proactivo, reexivo y comprometido con su
propio aprendizaje, se identica con su cultura
y reconoce su labor en la solución de problemas
del país. El modelo educativo también presenta
la caracterización del perl del estudiante y los
rasgos que lo caracterizan, tomando como base
las competencias genéricas propuestas por el
Proyecto Tuning.
Entre estos rasgos, podemos destacar la
mención a la capacidad de comunicación verbal,
no verbal y escrita.
De otro lado, el perl docente considerado
por el modelo educativo de la Universidad
sostiene que este va acorde a las demandas de la
educación de calidad; por ello, dene los rasgos
del perl docente en los siguientes aspectos:
profesional, comunicacional, pedagógico y
personal.
Sobre la competencia comunicativa,
propone:
Tiene competencia comunicativa y
pragmática, así como manejo del registro
académico, oral y escrito.
Tiene el conocimiento pragmático suciente
para reconocer el uso de los signos y los
códigos en los diferentes contextos sociales
y culturales en los que tiene lugar el proceso
enseñanza –aprendizaje.
Tiene capacidad para producir mensajes
para destinatarios diversos y en situaciones
comunicativas diferentes.
149
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
Es capaz de construir mensajes con la
suciente argumentación, precisión,
cohesión y coherencia.
Produce con claridad y precisión diversos
textos académicos con determinación del
destinatario y de los objetivos.
Comprende los mensajes de diversos textos
con niveles críticos y asume, respecto a
estos, puntos de vista sustentados.
Reconoce al estudiante como un interlocutor
válido.
Utiliza, tanto el aspecto paralingüístico
como el cinésico en el proceso de
interacción pedagógica.
Maneja la proxémica, en tanto espacios
personales y sociales, con signicación en
el proceso enseñanza - aprendizaje. (p. 35)
En el Plan de estudio de la carrera de
Ingeniería en Gestión Empresarial (2019a),
se asume como parte de la competencia
comunicativa los cursos de Estudios generales:
Lenguaje y comunicación y Redacción y
argumentación.
“Conoce, valora y utiliza el idioma con
claridad, propiedad y corrección en forma
oral y escrita” (p. 30).
“Conoce los fundamentos teóricos de la
producción de textos: redacta textos con
claridad y coherencia, con corrección
ortográca y sintáctica; y valora la
importancia de la redacción en los ámbitos
académicos y profesionales” (p. 38).
La evaluación de la competencia se establece
como una evaluación asumida desde un enfoque
basado en competencia. Se propone dos formas
de evaluar las competencias: la primera evalúa
el desempeño efectivo y eciente de una función
y la segunda, la combinación de habilidades,
destrezas, conocimientos y actitudes. Asimismo,
se deben establecer las diferencias entre los
estándares mínimos propuestos como aceptable
y lo logrado por el estudiante. Para ello, cada
curso debe evaluar las competencias tomando en
cuenta tres aspectos: procedimental, actitudinal
y conceptual, estableciendo una metodología
que se ajuste a sus necesidades (Tabla 1).
3.2. Análisis de caso
Como se ha descrito anteriormente en
los diversos conceptos, la competencia
comunicativa tiene diferentes puntos de vista en
cuanto a su aplicación. Lo importante es denir
qué enfoque se le está dando en los cursos que
contribuyen a la competencia de comunicación.
Para concretar los conceptos y su aplicación,
se eligió a la Universidad Nacional Agraria La
Molina y se diagnosticó su implicación y nivel
de aplicación práctica.
Lo primero que se encontró, en el más
alto nivel documentario de la universidad, es
el currículo del modelo educativo. En dicho
texto se menciona la comunicación oral en las
competencias básicas; en las competencias
genéricas, se hace mención al desarrollo de
la capacidad de comunicar ideas (UNALM,
2019). Dentro de la cadena de ujo de
información, las competencias básicas son
heredadas directamente por todas las carreras
universitarias, aquellas que podrán denir sus
competencias genéricas y especializadas.
Tabla 1.
Competencias Metodología Ponderación
de los criterios Criterios de evaluación
Procedimentales
A Prácticas 25% Responsabilidad
B Trabajos encargados y controles 10% Exposición oral y escrita
C Trabajo Final 20% Exposición y monografía
Actitudinales D Valoración de actitud y
participación 5% Puntualidad, responsabilidad,
actitud y participación
Conceptuales EExamen medio curso 20% Evaluación teórica - práctica
FExamen nal 20%
Total 100%
La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso
150
Julio - Diciembre 2024
En el caso de la carrera de Ingeniería en
Gestión Empresarial, presenta un plan de
estudios cuya última actualización fue en el
año 2021. En este documento se denen de
manera explícita las competencias básicas de
la universidad, colocando la comunicación oral
y la comunicación escrita como componentes
básicos a cumplir con diferentes cursos a lo largo
de la carrera universitaria. En las competencias
generales denidas en el plan de estudios se
encuentra la comunicación en inglés, que hace
alusión a la necesidad de ampliar el rango de los
códigos de comunicación. En las competencias
especializadas no se hace mención a alguna
competencia de comunicación (UNALM,
2021a).
Para evidenciar la aplicación de la teoría
en la práctica, se evaluaron los documentos
del curso de Comportamiento y Cultura de
las Organizaciones, comenzando por el sílabo
(2021b). Sus componentes son la sumilla y
el logro de aprendizaje. Cabe resaltar que el
sílabo de la UNALM tiene un enfoque por
competencias. En el caso particular del curso
analizado, se utilizó el sílabo del ciclo 2021-
II, que tiene la distribución de contenidos en
capítulos semanales. En la primera página
se refuerza la contribución del curso a las
competencias: comunicación oral y escrita; que
fueron señaladas correctamente en el plan de
estudios de la carrera (UNALM, 2021b). Sin
embargo, estas no se encuentran explícitas en
el currículo de la universidad, por lo que no se
podría hablar de un lineamiento general de la
documentación.
Más adelante, en la semana cinco del curso se
aborda la sección llamada “La comunicación”.
En este punto se propuso el logro “comprende
y maneja los factores comunicacionales y la
solución de conictos para el desarrollo de las
relaciones humanas en el trabajo” (p.3). Los
conceptos que serían desarrollados durante
esa sesión de aprendizaje serían: concepto
y proceso de comunicación, herramientas
para la comunicación efectiva, denición
y características del conicto, conicto y
negociación, estilos personales en el manejo de
conictos y en la negociación, negociación por
principios y como sistema, así como estilos de
negociación en diferentes culturas.
Para lograr lo anterior en los estudiantes de la
carrera de Ingeniería de Gestión empresarial del
tercer semestre (malla curricular de la UNALM,
2021a), emplearon el libro Comportamiento
organizacional, (capítulo 11: Comunicación)
de Robbins, S.P. y Judge. La orientación de la
comunicación en este libro se basa en la mejora
de las actividades de los grupos y equipos de
trabajo dentro de las organizaciones con enfoque
empresarial. La nalidad del capítulo analizado
era brindarles a los estudiantes los conceptos
y habilidades básicas para lograr transmitir
conocimientos a través de la transferencia de
información que motive, controle y gestione la
expresión emocional (Robbins y Judge, 2017).
Los materiales utilizados transversalmente,
enlistados en el sílabo analizado, fueron:
Materiales educativos interactivos como
materiales digitales: textos básicos,
direcciones electrónicas para recabar
información especializada sobre los
contenidos planteados.
Materiales educativos para la exposición:
plataformas Moodle y Google Meet para el
desarrollo de las actividades
Dinámicas digitales interactivas: en
aplicaciones como Mentimeter y Kahoot
Las metodologías diseñadas para lograr el
aprendizaje en cada sesión fueron:
Exposiciones: exposición dialogada y
demostraciones en clase sobre los temas
tratados, motivando al grupo, al diálogo y
el intercambio de información a través de
clases interactivas.
Debate: el estudiante entra en el proceso del
debate y aprende a saber escuchar y analizar
las opiniones de los demás, luego propone
sus propias ideas y respalda sus opiniones
con autores especializados de los temas
tratados.
Reexión: los alumnos interiorizan
conceptos adquiridos para permitirse
cuestionar posibles realidades a las que se
151
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
enfrentarán en el mercado laboral.
Prácticas dirigidas: el estudiante desarrollará
prácticas que le permitirán reforzar su
aprendizaje, con la orientación del jefe de
práctica.
Finalmente, para evaluar las competencias,
el docente propone a través del sílabo que las
evaluaciones sean de tres tipos:
Procedimentales: a través de la realización
de diferentes actividades como trabajos de
práctica (resoluciones de caso, análisis de
datos con toma de decisiones); trabajos
nales, para colocar en evidencia el
aprendizaje aplicado del estudiante y
trabajos encargados o controles que
permitan una evaluación permanente
Actitudinales: ponen a prueba la ética y
responsabilidad del estudiante valorando
el compromiso del mismo con el curso, a
través de su asistencia puntual a cada sesión
y su participación activa.
Conceptuales: permiten evidenciar la
síntesis del conocimiento en los exámenes
parciales y nales de la asignatura.
Con la necesidad de poder evidenciar el
desarrollo de la competencia comunicativa
en los estudiantes de la carrera de Ingeniería
en Gestión Empresarial, se analizó una de las
evaluaciones transversales a los cursos: la
exposición del trabajo nal, la cual se explica
en el curso después del examen parcial con la
nalidad de orientar a los estudiantes mediante
saberes previos. Además, se invita a formar
grupos de seis a ocho estudiantes considerando
que los cursos tienen aproximadamente 50
alumnos. Este documento consta de dos partes:
La primera es una monografía que recoge
el conocimiento aplicado de los conceptos
desarrollados en clase, el cual incluye el
tema de la comunicación, es decir, se evalúa
a nivel de conocimiento y aplicación.
La segunda parte consta del diseño y
exposición de una presentación basada en la
monografía con la condicionante de resumir
el trabajo en un rango de 15 a 20 minutos
para todo el equipo de trabajo. Es decir, los
alumnos deben ser capaces de organizarse
para exponer todos y cumplir con los
tiempos.
A continuación, se describirán aquellos
aspectos de la evaluación que se consideraron
relevantes para el desarrollo de la capacidad de
comunicación:
Mantener un formato uniforme, tanto en
la monografía como en la diapositiva: la
comunicación, como fue descrita en los
primeros apartados, se relaciona con los
usos lingüísticos y extralingüísticos (actos
de habla). Mantener una imagen prolija al
momento de entregar documentos comunica
de manera simbólica el compromiso y
cuidado que aporta un grupo de personas a
un entregable, es decir, se convierte en el
reejo de su trabajo.
Cumplir las indicaciones: en ocasiones se
da por hecho que las personas entienden
las indicaciones con una sola repetición y
sin retroalimentación. Por ello, es necesario
poner a prueba el entendimiento de las
instrucciones. En el caso especíco de la
exposición nal de curso de Comportamiento
y Cultura de las Organizaciones, la
problemática radica en que a lo largo de los
semestres se maniestan ciertas fallas en las
actividades previas a la exposición.
4. Conclusiones
El concepto de competencia aparece en
el ámbito industrial y se adapta al ámbito
educativo con el objetivo de lograr una
formación que desarrolle los potenciales
para un conocimiento generador de
riquezas.
El enfoque basado en competencias se
propone como modelo educativo a partir
del plan Bologna (Europa) y el proyecto
Tuning (América Latina) con el objetivo
de desarrollar una propuesta formativa que
desarrolle las capacidades de ejecución a
partir de las nuevas demandas del mercado.
La competencia comunicativa, discutida
La competencia comunicativa en la Carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial de la UNALM: Un estudio de caso
152
Julio - Diciembre 2024
en el ámbito de la lingüística, es un
proceso que va desde la concepción
formalista de la adquisición de la lengua
por un hablante-ideal (Chomsky) hasta la
problemática de los hablantes reales en su
práctica de interacción sociocultural y las
peculiaridades que ello expresa (Hymes).
Dentro de la propuesta educativa de la
UNALM se observa una coherencia
secuencial en cuanto a la competencia
comunicativa desde el plan de estudios
universitarios hasta el plan de estudios de la
misma carrera y el curso estudiado, con una
aplicación transversal.
La falta de denición de competencias
básicas en el Plan de Estudios de la
Universidad genera un quiebre en relación
con los demás documentos. Hay una
falta de coherencia y secuencialidad,
por desconocimiento u omisión de la
importancia dentro de la carrera.
La evaluación de la competencia
comunicativa se aborda únicamente en el
aspecto procedimental de manera explícita,
pero no se considera una evaluación
especíca los aspectos actitudinales y
conceptuales.
El desarrollo de las competencias no se
logra en un solo curso, sino más bien
se logra en diferentes niveles, es decir,
en cursos que sean prerrequisito para
garantizar la evolución de los diferentes
niveles esperados.
Dentro de las limitaciones de la
investigación, no se ha tenido acceso a los
demás cursos para vericar el desarrollo de
la competencia comunicativa.
Conicto de intereses
Los autores no incurren en conictos de
intereses.
Rol del autor
JCZ, YNC, AAJA: Conceptualización,
Investigación, Escritura-Preparación del
borrador original, Redacción-revisión y edición.
Fuentes de nanciamiento
Esta investigación no recibió ninguna
subvención especíca de ninguna agencia de
nanciación, sector gubernamental ni comercial
o sin nes de lucro.
Aspectos éticos / legales:
Los autores declaran no haber incurrido en
aspectos antiéticos ni haber omitido normas
legales.
ORCID y correo electrónico
Janet Corzo-
Zavaleta https://orcid.org/0000-0002-4289-2110
Yulissa Na-
varro-Castillo https://orcid.org/0000-0002-3697-5163
Anchante-
Arias, J. A. https://orcid.org/0000-0002-0452-9353
Referencias
Barón, L. y Müller, O. (2014). La teoría
lingüística de Noam Chomsky: del inicio
a la actualidad. Lenguaje, 42(2), 417-
442.
Bermúdez, L. y González, L. (2011). La
competencia comunicativa: elemento
clave en las organizaciones. Quórum
Académico, 8(15), 95-110.
Correa, J. E (2007). Orígenes y desarrollo
conceptual de la categoría de
competencias en el contexto educativo.
Documento de investigación N°
25. Editorial Universidad Del
Rosario, Facultad de Rehabilitación
y Desarrollo Humano. https://
repository.urosario.edu.co/bitstream/
handle/10336/3768/origenes%20
y%20desarrollo%2025%20enero%20
8-2008.pdf?sequence=4&isAllowed=y
Hirtt, P. N. (2009). L approche par compétences :
une mystication pédagogique.
L´école Démocratique (39), 1–34.
https://www.researchgate.net/
publication/317013948_L’approche_
par_competences_une_mystication_
pedagogique
153
Corzo-Zavaleta, J., Navarro-Castillo, Y., Anchante-Arias, J.A. Tierra Nuestra, 18(2), 142-153.
DOI. https://doi.org/10.21704/rtn.v18i2.1942
Julio - Diciembre 2024
Hymes, D. (1972). On Communicative
Competence. In J. Pride and J. Holmes
(eds.), Sociolinguistics. Selected
Readings (pp. 269-293, Part 2).
Harmondsworth: Penguin Books.
Jiménez, A.; Robles, F. J., y Madera, J.
A. (2015). El enfoque de las
competencias y su papel en la
Educación Superior. CONACYT.
http://dspace.uan.mx:8080/jspui/
handle/123456789/206
Ley 30220. (2014, 9 de julio). Congreso
de la República. Diario ocial El
Peruano, N°1108082-1. https://cdn.
www.gob.pe/uploads/document/
file/105207/_30220_-_09-07-
2014_10_14_18_-Nueva_Ley_
Universitaria.pdf?v=1644428544
Mairal, R., Peña, M., Cortés, F. y Ruiz, F.
(2012). Teoría lingüística: métodos,
herramientas y paradigmas. Editorial
Universitaria Ramón Areces.
McClelland, D.C. (1973). Testing for
competence rather than for
intelligence. American Psychologist,
28, 1-14. https://www.therapiebreve.
be/documents/mcclelland-1973.pdf
Navarro, L. y Ortiz, A. (2010). ¿Cómo estimular
el desarrollo de las competencias
comunicativas? EDUCOSTA.
OCED, DeSeCo & Rychen. (2003). Denition
and selection of competencies.
Theoretical and conceptual foundations
(DeSeCo). Summary of the nal report
“Key competencies for a successful
life and a well-functioning society”.
https://www.oecd.org/pisa/35070367.
pdf
Perrenoud, P. (2004). Diez nuevas
competencias para enseñar. https://
www.uv.mx/dgdaie/files/2013/09/
Philippe-Perrenoud-Diez-nuevas-
competencias-para-ensenar.pdf
Reglamento de la Ley 28740, Ley del Sistema
Nacional de Evaluación, Acreditación
y Certicación de la Calidad Educativa.
(2007, 10 de julio). El Presidente de la
República. Diario ocial El Peruano,
82347-3. https://www.leyes.
congreso.gob.pe/Documentos/Leyes/
Reglamentos/28740-RE.pdf
Reyzábal, M. (2012). Las competencias
comunicativas y lingüísticas, clave
para la calidad educativa. Revista
Iberoamericana sobre Calidad,
Ecacia, Cambio y Educación, 10(4),
63-77.
Robbins, S. y Judge, T. (2017). Comportamiento
organizacional. Pearson Educación.
Ruiz, M. (2010). Concepto de competencia
desde la complejidad. Editorial Trillas.
Tobón, S. (2006). Aspectos básicos de la
formación basada en competencias.
https://www.researchgate.net/
publication/291353525_ASPECTOS_
BASICOS_DE_LA_FORMACION_
BASADA_EN_COMPETENCIAS
Directorate General for Education and Culture
of European Commission (2003). An
introduction to Tuning Educational
Structures in Europe. The contribution
of universities to the Bologna process.
http://tuningacademy.org/wp-content/
uploads/2014/02/Universities-
Contribution_EN.pdf
Universidad Nacional Agraria La Molina
[UNALM]. (2019). Modelo educativo.
Resolución 0006-2017-AU-
UNALM.
Universidad Nacional Agraria La Molina
[UNALM]. (2021a). Plan de estudios
de la carrera profesional de: Ingeniería
en Gestión Empresarial.
Universidad Nacional Agraria La Molina
[UNALM]. (2021b). Sílabo del curso
de Comportamiento y Cultura de las
Organizaciones.